Objetivo de esta página → Animar a todo el que lo lea a ver «el vaso lleno» a pesar de que el entorno sea negativo. Para ello, deberéis leer hasta el final para comprender esto. No es tiempo de venirse abajo sino de innovar, ser creativos y emprender, ¡Ánimo! 😉
La crisis económica que padece el país en estos últimos años es consecuencia de la «burbuja inmobiliaria» que se originó en Estados Unidos debido, principalmente, a los altos precios de las materias primas (inflación) y a la crisis crediticia, hipotecaria y de confianza en los mercados, debido a la desconfianza que existía en los mercados de impago de los contratos llevados a cabo con anterioridad por la subida de los precios y que los bancos no se «fiaban» de que sus clientes le devolvieran el dinero que prestaban, con lo que no daban ni dan créditos. Debido a todo ello, se producen una serie de acontecimientos negativos que, en general, conllevan crear un «círculo vicioso» en el que todo se convierte en negativo. Me refiero a:
– La inflación (π) con la consiguiente subida de los precios, manteniéndose o reduciéndose (según el caso) del sueldo de forma paralela;
– El descenso de la demanda, debido a esa subida de precios, puesto que los productos y servicios cuestan más que antes;
– La caída de las ventas en la mayor parte de las empresas, tanto de bienes como de servicios, como consecuencia de lo anterior, suponiendo un aumento de los stock o inventarios, lo que conllevan incrementar el coste de almacenamiento de las empresas.
– La desconfianza en los mercados, lo que conlleva que los inversores no dejen sus ahorros en manos de nadie, porque prefieren tener el dinero seguro en vez de conseguir rentabilidad que al final acabe sin ni siquiera recuperar el capital invertido.
– Los ERE (Expedientes de Regulación de Empleo), es decir, despidos, creciendo, por tanto, el desempleo;
– La crisis que supone cambios en los hábitos de consumo (se consume menos), cambios de leyes y otros aspectos que pueden ser ajenos a nosotros.
– El pesimismo a la hora de encontrar trabajo o crearlo, de enfrentar los problemas que antes podían tener solución, más por no pensar en éste más que en la crisis y otros aspectos que somos nosotros mismos los que tenemos más en cuenta que lo que realmente importa y que puede ser positivo para nosotros.
Por el contrario, la expansión tiene muchas cosas buenas que aunque no las veamos están ahí, y no me refiero a la expansión económica, de la que no tenemos control para conseguirla (diversos factores externos ajenos a nosotros), sino a la expansión personal, me refiero al crecimiento personal.
Si somos list@s, podemos convertir la crisis en una oportunidad en vez de en una amenaza, esto es, innovar, emprender o ser creativos centrándonos en lo realmente importante, puesto que la crisis nos hace centrarnos en lo que no podemos controlar, dejando a un lado lo que podemos hacer por nosotros mismos y que, para mucha gente, puede ser una salida a su «mala situación».
Es decir, que no nos quedemos esperando a que algo ocurra, sino, más bien, ir pensando ideas que llevar a cabo, innovar en lo que hacemos, emprender (crear un negocio a partir de una idea), etc, en definitiva, no perder el tiempo y ACTUAR.
Así mismo, debemos de creer en nuestras posibilidades, es decir, creer en uno mismo, porque hasta que no lo intentamos, no sabemos de lo que somos capaces de hacer. Para ello, hay que ser valientes, o sea, pensar que la meta la podemos conseguir y «aventurarnos» a llevar a cabo un proyecto, personal o profesional, teniendo en cuenta todo los pros y contras pero sin dejar de intentar hacer realidad nuestros sueños.
Para todo ello, lo más importante es tener un pensamiento positivo que nos anime a creer que todo es posible y que somos dueños de nuestros futuros. Sí alguien consiguió algo parecido a lo que queremos, ¿por qué no lo vamos a conseguir nosotros?
Cómo se ve, la crisis tiene un aspecto que puede ser controlado por nosotros , el pesimismo que debemos de convertirlo en optimismo y conseguir ese «es posible».
Cómo se suele decir, «sino puedes con tú enemigo, únete a él» pues eso es lo que hay que hacer, es decir, muchas cosas de la crisis no las podemos controlar, pero pensar en que todo irá a peor y que, además, nosotros no podemos hacer nada para evitarlo y nos quedarnos de brazos cruzados, eso, sí que no va a resolver nada, más que empeorar las cosas, por eso, hay que pensar en qué hacer para evitar esta situación y, claro está, actua(r)ndo en aquello que podemos controlar.
Como se puede apreciar en la figura anterior (Fuente: propia) la «expansión personal» tiene muchos más aspectos a tener en cuenta, y todos positivos, sin embargo la «crisis» sólo son acontecimientos de los que no podemos ser responsables ni podemos controlar. Por ello, animo a que se piense en positivo y creamos en nosotros para que el futuro sea mejor.
Un consejo personal: si tenéis tiempo o en momentos en los que estéis de bajón, escuchéis canciones que os relajen y/o aquellas que, gracias a grandes artistas que nos dejan, transmiten optimismo y buenas vibraciones, esas que nos hacen olvidar todo los problemas y tienen «palabras claves» que transmiten positividad a la vida.
Y también, el deporte, como ya expresé en una de las páginas de este blog, puede ayudar a superarnos personalmente y hacernos ver que, hasta el dolor puede ser un aliado si éste nos ayuda a conseguir una meta, puesto que nos hará sentir de lo que somos capaces de hacer.
Ah! y nunca hay que perder la sonrisa, es lo más bonito que tenemos y que nos hace estar bien con nosotros y con los demás. A veces las cosas pasan por una razón aunque no sepamos cuál es en ese momento, pero, os aseguro que siempre habrá momentos buenos que no debemos de perdernos y, por esos son por los que tenemos que luchar.
Un saludo a tod@s y espero que os ayude a pensar en +.
Blog de Magda Peral 